Hipnosis Ericksoniana: ¿Qué es?

Hipnosis Ericksoniana es el método de hipnosis creado por Milton H. Erickson. Fundamentado en el uso de un lenguaje ambiguo, incluso en ocasiones confuso. Con él, el cliente se sumerge en el trance hipnótico y conecta con sus propios recursos internos. Es él mismo quien encuentra las soluciones adecuadas a su situación conectando con su potencial: interno e inconsciente.

El estado de trance hipnótico es un estado natural. Y lo experimentamos más a menudo de lo que nos creemos. Estamos bajo sus efectos  cuando el cerebro pasa del estado de vigilia (Beta) al de las ondas Alfa y/o Theta. Sucede cuando estamos tan concentrados en nuestros procesos internos que nos “desconectamos” del mundo exterior. Por ejemplo, cuando leemos un buen libro  y no nos percatamos de que están llamando a la puerta. O cuando estamos en el cine y no escuchamos los comentarios de ciertas en el momento más interesante. En ambos ejemplos estamos tan enfocados en lo que leemos o vemos que es lo único que se representa en nuestro cerebro y eso es hipnosis.

Milton Erickson

hipnosis ericksonianaAntes de abordar con más detalle qué es y qué no es hipnosis, hablaré brevemente sobre Milton Erickson.

Milton H. Erickson nació en 1901 en un pueblo minero de Nevada, que la familia Erickson abandonó cuando quiso escolarizar a sus hijos. A los 17 años contrajo poliomielitis. Esta enfermedad lo discapacitó hasta tal punto que quedó prácticamente inmóvil. Fue él mismo quién recuperó todas sus funciones con su propio esfuerzo, utilizando su mente en lo que más tarde, al estudiar hipnosis, identificó como un proceso de auto hipnosis.

Se graduó como psicólogo y médico en la Universidad de Wisconsin, participando en las investigaciones que el Dr. Hull estaba llevando a cabo sobre sugestionabilidad, aprendiendo hipnosis y destacando por realizarla de una forma muy personal.

El modelo de hipnosis de Erickson

Después de eso prosiguió explorando cómo hacer hipnosis de la manera más “naturalista” posible, creando así la hipnosis ericksoniana. Erickson impulsó una nueva forma de aplicar la hipnosis terapéutica, fomentando la flexibilidad y respetando la individualidad.

Lo original, novedoso y revolucionario de su trabajo residía en el planteamiento básico del mismo: poner el foco en la solución y no en el problema. Y lo hacía siempre poniendo al paciente en contacto con sus recursos inconscientes, cosa que es la más significativa en la hipnosis ericksoniana, más que la técnica hipnótica en sí misma. No era un teórico, sus técnicas no se pueden encasillar en un protocolo preestablecido, sino que se adaptan a cada cliente y al problema que éste presenta.

Investigó mucho sobre Hipnosis y enseñó su modelo, la hipnosis ericksoniana. Daba conferencias por todo el mundo. Y, cuando las secuelas de su enfermedad le obligaron a trasladarse a un clima seco, recibía a jóvenes y experimentados profesionales, como Richard Bandler y John Grinder, curiosos de descubrir el modo de hacer de quien conseguía curaciones en tan poco tiempo y con tal nivel de éxito.

Murió a los 79 años en 1980, tras inaugurar la Milton Erickson Foundation y dejando profesionales de diferentes ámbitos entrenados en su modelo de terapia.

¿Qué es hipnosis?

Según el Instituto Erickson de Madrid:

Es un estado de focalización de la atención consciente con una disociación momentánea que permite acceder a habilidades inconscientes, aunque éstas sean consideradas habitualmente inaccesibles.

En este estado, agradable, quedan en suspenso las dudas y los temores. Produce una gran relajación corporal y muscular favoreciendo un pensamiento activo y creativo. A la vez  permite, como ha sido demostrado con estudios científicos, el acceso a funciones habitualmente relegadas al parasimpático o al inconsciente, tales como:

• Capacidad de controlar la sensación dolorosa.
• Capacidad de producir distensión y relajación controlando la ansiedad.
• Capacidad de superar miedos.
• Mejoría de las funciones del sistema inmune.
• Gran eficacia para combatir el estado depresivo.
• Capacidad de paliar efectos secundarios de algunas medicaciones.

Por lo tanto, cada vez que apartamos el foco consciente de la realidad externa, estamos en algún nivel de trance hipnótico. Sobre todo cuando ello va acompañado de un estado de relajación.

¿Qué NO es hipnosis?

En la web del Instituto Erickson de Madrid podemos leer:

A pesar de los malentendidos divulgados por los magos de teatro, que hacen uso de una parte de las técnicas hipnóticas mezclándolas con trucos, la hipnosis ha estado presente desde siempre en las Universidades de Medicina y en muchos Hospitales y Clínicas de todo el Mundo.

Lejos de ser un estado donde el sujeto pierde el conocimiento es, por el contrario, un estado de focalización de la atención consciente. Con una disociación momentánea que permite acceder a habilidades inconscientes, aunque éstas sean consideradas habitualmente inaccesibles.

Por lo tanto, durante el estado hipnótico:

  • No se pierde la conciencia.
  • No es posible “manipular”, “reprogramar”, acceder a partes inconscientes oscuras o hacer aflorar recuerdos traumáticos acontecidos. No en mayor medida de lo que se lograría en cualquier conversación habitual.

En suma, la persona no está a merced del profesional que trabaje con hipnosis. Ya que TODA HIPNOSIS ES AUTOHIPNOSIS.

Lo explico más detalladamente a continuación.

¿Qué es autohipnosis?

La autohipnosis es, en realidad, lo que se produce en toda hipnosis. Ya que el hipnoterapeuta no hace más que guiar a la persona para que ella pueda auto inducirse el estado hipnótico. Con ello, la propia persona será la que controle sus sensaciones internas y sus pensamientos. Pudiendo estar en contacto con unos recursos que le dan una capacidad de actuación y una manera de promover cambios.

Hay básicamente dos maneras de hacerlo:

La Hipnosis Ericksoniana

De nuevo, según manifiesta el Instituto Erickson de Madrid en su web:

Su aportación al campo de la hipnosis tiene dos vertientes:

Un protocolo hipnótico sencillo, amable y sin parafernalia. Parafernalia o ritual que posiblemente la hipnosis clínica había heredado de los Magos de Teatro, quienes fueron los que importaron la hipnosis de los faquires de Oriente. A esta nueva forma de hacer hipnosis se la llama “naturalista” y consiste en una mera conversación sin necesidad de trance profundo.

Un estilo o modalidad de psicoterapia totalmente novedoso ya que no busca EL ORIGEN (o supuesto trauma) del problema, sino que orienta a la persona hacia la solución y NO PRETENDE CAMBIAR LA CONDUCTA solamente con razonamientos e indicaciones, sino MOTIVAR A LA PERSONA y ponerla en contacto con sus PROPIOS RECURSOS para que ella misma produzca los cambios que elija.

¿Es peligrosa la Hipnosis Ericksoniana?

¿La hipnosis puede ser perjudicial en algún sentido? Ésa es la gran preocupación de la mayoría de las personas que desconocen la hipnosis ericksoniana. Sin embargo, cabe señalar, según las investigaciones actuales, que es difícil perjudicar a nadie con la hipnosis ericksoniana. No se le puede forzar a actuar en contra de su voluntad, de sus valores y sus creencias. Los ensayos psicológicos han demostrado que es más complicado conseguir que alguien cometa un acto no deseado, contra él mismo o contra los demás, si está en estado hipnótico que en estado de vigilia. Ya que nuestra mente inconsciente, de manera natural, interpreta las sugestiones que recibimos en estado de trance de la manera más beneficiosa para nosotros y nuestro sistema de creencias.

La hipnosis no puede controlar la mente de nadie más de lo que podría hacerse en cualquier conversación. Cualquier sugestión que no fuera beneficiosa para el individuo hipnotizado pasaría desapercibida o regresaría al individuo al estado de vigilia, poniendo fin al trance hipnótico. En realidad, lo que ocurre en una sesión de hipnosis es una auto hipnosis. Me explico: el hipnoterapeuta no hipnotiza al paciente. Es el paciente quien se autohipnotiza con lo que el hipnoterapeuta le dice. Porque para que se dé el proceso hipnótico es imprescindible el permiso del paciente, consciente e inconsciente.

Sin embargo, como cada individuo es único, hay diferentes niveles de sugestionabilidad, por lo que hay individuos más influenciables que otros.

Aplicación de la hipnosis

Por su facilidad de aplicación, la hipnosis ericksoniana es de gran utilidad en todas las disciplinas de acompañamiento, como la Programación Neuro Lingüística y el Coaching. También es de gran importancia en la mejora de la salud. En los últimos años la hipnosis está adquiriendo cada vez más presencia y relevancia incluso en el mundo de los negocios. Porque al utilizar el lenguaje hipnótico como una forma de persuadir y conectar de manera más profunda con cualquier interlocutor, se trate de clientes o de colaboradores.

Actualmente se está extendiendo el uso de la hipnosis en el ámbito médico de una forma más sistemática, especialmente en el mundo anglosajón y últimamente se está imponiendo de forma asombrosamente rápida en todo el mundo francófono. Dicha incorporación es impulsada por los sistemas de salud nacionales y compañías aseguradoras. Esto es debido al ahorro de costes que supone la utilización de la hipnosis en diversos contextos médicos, tanto en fármacos como en el tiempo de recuperación del paciente.

Desde los años 90 se ha podido verificar la realidad del fenómeno hipnótico gracias a las modernas técnicas de neuro-imagen. Éstas permiten observar la actividad cerebral. Gracias a estas técnicas se ha constatado, por ejemplo, que las sugestiones hipnóticas que se realizan para modificar las percepciones visuales (color), auditivas o de dolor, provocan la activación de las mismas zonas cerebrales que la experiencia perceptiva real. Cosa que no sucede cuando el sujeto imagina estas experiencias sin hipnosis.

Hipnosis y Medicina

La utilización de la hipnosis en medicina tiene una larga historia y en la actualidad. El estudio más exhaustivo sobre la eficacia de la hipnosis ha sido realizado por la Clínica Mayo, una de las más importantes organizaciones clínico-sanitarias de Estados Unidos. En este estudio, “Hypnosis in Contemporary Medicine”, publicado en el año 2005, se establece una larga lista de condiciones y patologías médicas en las que se ha demostrado la eficacia de la hipnosis. Se recomienda su uso para el tratamientos de la alergia. Es muy eficaz en la anestesia para alivio del dolor y  cirugía.  Recomendable en recuperación postoperatoria y obesidad, entre otros.

En resumen, la hipnosis ericksoniana es una potente herramienta que ha demostrado su eficacia en numerosas áreas de la medicina. Puede suponer una mejora sustancial en la recuperación y calidad de vida de los pacientes. También favorece el cambio de conductas, transformación de creencias, eliminación de hábitos nocivos y la generación de los estados positivos. Todo ello necesario para que cualquier persona consiga sus objetivos. Motivo por el cual se usa la hipnosis ericksoniana en los procesos de Coaching con PNL.

Niveles de trance hipnótico

Existen tres niveles distintos de trance , es decir, de relajación.

El primer nivel es el llamado trance ligero. Durante el cual el ritmo respiratorio disminuye ligeramente, el tono muscular en el rostro se relaja y existe una ligera dilatación de las pupilas (cuando estamos con los ojos abiertos). En este nivel las facultades críticas quedan transitoriamente suspendidas.

El segundo nivel es el trance medio. Es donde los músculos del cuerpo se relajan aún más. El cuerpo se torna más relajado y la experiencia más disociada del entorno. La respiración desacelera más y las pupilas cambiarán aún más. El tono muscular de la cara, cuello y hombros será más evidentemente relajado. Aquí el individuo hipnotizado parece que está en un trance profundo. Sin embargo, lo que hace es estar adaptándose a las sugestiones.

El tercero es un estado profundo. Existe una relajación de los músculos profundos. En éste, se pueden controlar las funciones autónomas. Es tan profundo de relajación que permite que una cirugía se lleve a cabo sin anestesia. En este estado el individuo vive la sugestión como real.

Las ondas cerebrales

Estos tres niveles de trance se detectan mediante la observación de las respuestas del paciente/cliente. Sin embargo, los estados de trance también pueden ser identificados de acuerdo con el nivel de actividad cerebral, medibles por las ondas cerebrales.

Cuando nuestras neuronas lanzan señales eléctricas al mismo tiempo y de un modo continuado, configuran lo que conocemos como patrones de onda cerebrales. Dichos patrones pueden ser registrados fácilmente mediante una electroencefalografía.

Estas ondas cerebrales pueden ser clasificadas en diferentes tipos según su frecuencia. A continuación, solo definiremos las cuatro ondas que guardan relación con la hipnosis.

Ondas Beta (14 a 30 Hz)

Cuando nuestro cerebro se encuentra en estado Beta hay una gran intensidad de actividad neuronal. Son las ondas relacionadas con los comportamientos que requieren permanecer en un cierto estado de alerta. Es cuando nos encontramos en estado de vigilia y cuando necesitamos del uso de los procesos conscientes.

Ondas Alfa (8 a 14 Hz)

El estado Alfa es aquel en el que nos encontramos cuando hay un cierto nivel de relajación. Son un tipo de onda cerebral que presenta menos frecuencia que las beta. Por ejemplo, cuando estamos tumbados en una playa disfrutando de la tranquilidad del entorno, cuando estamos viendo una película, e incluso cuando estamos disfrutando de una buena clase o una conferencia. No estamos dormidos y cuanto más abajo estamos en el estado, más podemos llamarlo hipnosis.

Ondas Theta (4 a 8 Hz)

Las ondas Theta presentan una mayor amplitud de onda y cuando estamos en estado Theta nuestro cerebro se encuentra en estado hipnótico. Están asociadas a los estados de relajación profunda e inmersión en representaciones internas (recordadas o imaginadas). Cuando nos encontramos en Theta hay consciencia (la hipnosis no elimina la consciencia) pero es una consciencia desconectada de lo que ocurre a nuestro alrededor.

Ondas Delta (1 a 4 Hz)

La frecuencia Delta son las que tienen mayor amplitud de onda, es decir, que su frecuencia es muy baja. Y son las correspondientes al estado de sueño profundo. Un estado que no es apropiado para aplicar la hipnosis. Cuando queremos hipnotizar a un individuo, hemos de evitar que se duerma, es decir que llegue a este nivel delta, porque, aunque el cerebro se encuentra en estado de descanso, y no deja de estar activado, está ocupado con procesos que no dependen de que se esté en un estado de consciencia.

Hipnosis clásica vs Hipnosis Ericksoniana

Hipnosis clásica

En la utilización de la hipnosis clásica, el hipnotizador realiza algunas pruebas de sugestionabilidad, con la intención de comprobar la facilidad o dificultad con la que el individuo objeto de hipnosis puede entrar en trance hipnótico.

Para inducir el trance hipnótico el hipnotizador utiliza de manera repetitiva sugestiones de cansancio y órdenes directas de dormirse.

Cuando el individuo ya está bajo los efectos del trance, el hipnotizador ofrece sugestiones directas dirigidas al objetivo del proceso hipnótico.

Este modelo clásico se basa en el poder y la utilidad del hipnotizador.

Hipnosis Ericksoniana

El modelo de hipnosis ericksoniano se apoya en una relación de colaboración con el individuo hipnotizado y el hipnoterapeuta se adapta a la realidad del paciente/cliente para formar parte de su marco de referencia, generando el nivel de confianza apropiado y propiciar el proceso hipnótico.

Se trata de un modelo que favorece el desarrollo y se enfoca en las opciones que aportan posibles soluciones, en lugar de ahondar en el problema.

El hipnoterapeuta acompaña sin dirigir y la transformación siempre surge del potencial inconsciente del paciente/cliente.

Resumiendo podríamos decir que:

  • La hipnosis ericksoniana es permisiva mientras que la clásica es autoritaria.
  • La hipnosis clásica es directa mientras que la ericksoniana es indirecta.

Elementos básicos de la hipnosis ericksoniana

Para que pueda darse el proceso hipnótico se necesitan tres ingredientes principales: el consentimiento, la fijación y la sugestión.

El consentimiento está implícito en una relación en la que el paciente/ cliente llega a la consulta conocedor de que el hipnoterapeuta hace hipnosis, para resolver el conflicto que le ocupa.

La fijación se encarga de que el cliente enfoque la atención en una única percepción, preferiblemente interna, porque pertenece a la zona controlada directamente por el paciente/cliente.

La sugestión es el tercer elemento, indispensable en el proceso hipnótico. Consiste esencialmente en un mensaje, en el que el contenido importa menos que la forma que se le dé. El simbolismo de la sugestión, su ritmo y su dirección permitirán al hipnoterapeuta entrar en el marco de referencia del cliente y generar la relación terapéutica apropiada.

Hipnosis es sugestión

Etimología del término sugestión

El término “sugestión” proviene de latín suggestio, formado por la preposición sub, que significa debajo, y el sustantivo gestio, derivado este del verbo genere, que significa “llevar”. Así pues, etimológicamente sugestión quiere decir “acción de llevar abajo” y ahí procurar, inspirar, sugerir.

Otra etimología más simbólica tomaría como raíz sub y la sumaría a stare, uno de cuyos sentidos es “hacer emerger» y, por extensión, “mantener de pie”. “Sugerir” evocaría la idea de extraer de las profundidades, conducir hacia la luz, inducir al incorporarse, hacer surgir, despertar algo que está latente.

Es también posible imaginar que el término proviene del verbo gestare: portar un niño, estar embarazada, lo que invita a “desembocar en, al término de un proceso de maduración”.

De todos estos sentidos, que se entremezclan, retengamos la idea de ”hacer surgir de” y de “despertar en el otro algo que ya se encontraba allí”.

Principios para la formulación de sugestiones

Para inducir un estado de trance hipnótico suficientemente profundo para que el cliente resuelva el conflicto, es necesario llevar a cabo el proceso cubriendo varias etapas, que continúan solidificando el esquema básico de consentimiento, fijación y sugestión.

1. Establecer Rapport

El paso principal para inducir cualquier trance hipnótico consiste en establecer una buena relación (rapport) con el inconsciente de la otra persona.

En hipnosis, rapport va más allá de generar el clima de confianza al que conocemos en el contexto de Coaching o Programación Neuro Lingüística. Lo podríamos definir como la “absorción” de la atención inconsciente del paciente/cliente.

2. Despotenciar la mente consciente

Hay que desconectar la mente consciente de la persona y podemos utilizar varias tácticas, siendo muy valioso el uso de los patrones de fijación para que la mente se concentre en aquellas representaciones que nos permiten comunicar con la mente inconsciente.

3. Hacer las sugestiones

Una vez que la mente analítica está desconectada y la persona se da permiso para viajar hacia dentro, es el momento de generar las sugestiones directas o indirectas para conseguir el objetivo.

El lenguaje verbal en hipnosis

La voz no es tan importante en hipnosis ericksoniana como la correcta utilización del lenguaje verbal. Para llevar a alguien a cualquiera de los dos estados de trance  hipnótico debe usarse dos tipos  de lenguaje.

El lenguaje «sensorial»

Es el lenguaje de los sentidos, la manera de describir las sugestiones, metáforas y escenarios metafóricos involucrando al cliente con su única percepción e invitándole a trasladarse en su mente “viendo, sintiendo y escuchando”.

Cuando conseguimos trasladarnos mentalmente con los cinco sentidos a una experiencia vivida o imaginaria, nos desconectamos del entorno y nuestro cerebro accede más fácilmente al esta de ondas alfa, que favorece la relajación y, por lo tanto el estado hipnótico.

Por ejemplo: “ahora quiero pedirte que te traslades mentalmente a una playa, en un día soleado con el mar en calma y una temperatura muy agradable. Que te dispongas a pasear por la arena que tiene un color maravilloso, notándola bajo tus pies… mientras miras el mar como va y viene con cada ola que parece querer acercarse a ti, escuchas el sonido de su ir y venir…”

El lenguaje hipnótico

Es el lenguaje de las sugestiones. Es el lenguaje que se refiere a lo que queremos que ocurra durante el trance. Recuerda que no hipnotizamos sino que las personas se autohipnotizan con lo que decimos. Cuando queremos hipnotizar a alguien usamos un lenguaje ambiguo, impreciso y genérico. Así el oyente pueda insertar su propia interpretación y encaje en su realidad. El lenguaje hipnótico es indirecto: son sugestiones y no órdenes.

Por ejemplo: “Es bueno que a medida que vas inhalando y exhalando puedas ir relajándote a un ritmo apropiado para ti. Y que mientras eso haces te des cuenta de lo fácil que es. Estar aquí sin tener nada más que hacer que…”

La metáfora en hipnosis ericksoniana

La palabra metáfora tiene sus raíces en el griego y significa “llevar más allá”. Se trata de llevar la palabra de un sentido concreto a un significado abstracto o simbólico. Normalmente se hace una comparación entre dos cosas que aparentemente no tienen relación. Sin embargo, se crea un vínculo, como puede ser “labios de rubí” (es imposible tener los labios de rubí) al decirlo así enaltece la cualidad de los labios.

El lenguaje metafórico es muy útil para desarrollar la creatividad y las nuevas ideas. Una vez que se expresan estas ideas en forma de metáfora, la persona toma lo que necesita. De esta manera, encuentra sus propias soluciones con la ayuda de su mente inconsciente. Esto es debido a que la metáfora ilustra, en forma concreta y sencilla, una idea, una sensación, o una emoción. Así, el receptor filtra con mayor facilidad la imagen nueva porque en muchas ocasiones ésta crea un impacto novedoso y totalmente diferente a la realidad.

Los hemisferios cerebrales

Un apunte desde el punto de vista de los hemisferios cerebrales. Las metáforas influyen mucho más al hemisferio derecho que al izquierdo. El hemisferio izquierdo, el racional, entiende las palabras por sí solas. El hemisferio derecho, el creativo, les da el significado para que llegue el mensaje al inconsciente. El derecho sí logra hacer la conexión entre el “rubí” y los “labios”. Y nada tienen que ver con el pensamiento lógico. Por esta misma razón que la metáfora con todo su simbolismo penetra sin problema en el hemisferio derecho, y por lo tanto llega al inconsciente del que escucha, sin obstáculos, provocando más opciones y alternativas. Esta parte creativa desarrolla más ideas y activa el pensamiento lateral.

La metáfora se usa muchísimo en hipnosis ericksoniana porque ésta no enjuicia, ni reclama, ni ordena. Simplemente explica de otra manera un hecho o una sensación sin agresión. El inconsciente acomoda las ideas para ajustarse a los programas del que escucha. En la terapia es muy útil para ayudar en la relajación, para cambiar estados de salud y para entender el estado interno del paciente.